Saludos a todos, ya estoy de vuelta. Ha sido una pasada. Casi seis mil kilómetros a razón de mil kilómetros diarios. Tres dias de concentración en una poza llena de miles de moteros de todas partes.

Llegó el momento de la partida, todo listo


El primer dia hice unos 1300 kms, en Madrid se me unió un gran motero, Oscar que resultaría un perfecto compañero de viaje.
El segundo dia, hicimos aprox 1000 kms, atravesamos Francia y adentramos en Suiza.
Notareis que no hacemos fotos del viaje, pero es que íbamos engatillados y paramos para repostar y salíamos zumbando.

Ya en Suiza, dormimos en Gruyere, que es donde se inventaron los agujeros, y como hacían quesos, les aplicaron su invento, y no veas lo famosos que se hicieron.


Aquí unas vistas desde la habitación.



De vez en cuando una parada para hacer comida latina, una lata de atún y otra de sardina.


Por fin en la concentra, llegamos de noche, la señalización era inexistente y rápidamente montamos las tiendas e hicimos el fuego, 2 bajo cero.


Pablo, un motero de Pontevedra que venía con su valiente novia Ana junto a los extremeños de las harley.

Sigo, el amanecer bajo cero, no pasé nada de frío gracias a los consejos de mi hermano montañero.

Hicimos una pequeña colonia española, pero iban llegando más.

Paso a mostrar algunos engendros, sobre todo habían muchas motos antiguas con sidecar y las BMW adventure a patadas, algunas de campo y por supuesto ninguna 1800

Otra maravilla de la tecnología.

Pregúntale a éste si pasó frío.




Cuando salía el Sol se fundía la nieve y aparecía el barro, o sea, diversión total vamos.
A los bárbaros del norte les encanta el ruido, la bebida y son aficionados a los eructos, pedos y delicadezas tales...

Otra vez aquí, con más fotos de motos y del ambiente que se respiraba allí.


El personal se las ingenia para el hielo, fijaos en los esquies que les ponen a las motos, además de las cadenas y protecciones para el frio.





Que os parece el cacharro, historia rodante de la moto.


Para ir cómodos nada mejor que un buen asiento.



Los últimos modelos de las fábricas japonesas exponían sus productos.

Los pintores más afamados a nivel mundial...
y que me decis del equipamiento, los cofres...



El personal se las ingenia para transportar material



y es que no te daban nada, la leña había que comprarla, las balas de paja, las pegatinas, paganini, el escudo, todo, te cobraban 20 euros y te dejaban entrar, sólo eso, no te dan ni la hora.



Este personaje debía ser alguien en el ambiente porque todo el mundo se fotografiaba con el.



Este otro tenía una cabina de teléfono falsa que estaba llena de bebidas.

Sigo, ni el Batmovil ni ná, el batemóvil si que es util.
Prometo que lo vi por carretera.



Y que me dices de esto???? Vinieron con uno acostado en la hamaca rodante y la policia se descojonaba, vamos, como se descojonaría un guardia civil.





Cada uno transporta la leña a su manera. Las hogeras no paran toda la noche.


Protecciones para el frio de los pies, algo aprendí de los bárbaros, a la ida fué un suplicio los pies helados, de vuelta, me apliqué el invento y la mar de calentito.



BMWs hasta en la sopa.

Motocamión volquete.



El repartidor de la cerveza negra, un serpentín andante.



Esta es para los malos humos.



Las manoplas son imprescindibles y las protecciones para quitar el frio a las piernas muy recomendables, si además vienes de lejos, artilujios calefactables.

El campamento de los rusos, y yo creí que venía de lejos.







Increible pero este elemento durmió la mona sin tienda ni saco ni ná en el asfalto helado y sobrevive, cualquier ser humano "arruga el labio"


Para perder la cabeza vamos.



La moto de Dart Vader.

Un KETTENKRAD, medio tanque, medio moto.



Motos militares para todo uso.



Al cochinillo le está entrando una calentura...no veas el cochinillo



Este tio si que hizo un viaje, cruzó USA, subió a Alaska y por la costa del Pacífico bajó hasta la Patagonia, además de algunas aventuras que me contó, y solo.



Un toque de humildad te llevas cuando crees que has echo algo y ves a dos chavales de Granada con scooters de 125 la mar de contentos por allí, o los rusos que llevan unos aparatos que se caen a cachos y funcionan con vodka.

Aquí os presento a los primos de Conan.

Y que os parecen estos superdeportivos de tres ruedas, con la carrocería de cuero y un motor de ciclomotor.



Yo quiero uno para cuando tenga nietos llevarlos al parque.




La preceptiva foto en la entrada con un grupo de Españoles, Santa Claus es extremeño y va en harley, mandó a los renos a......



Los bárbaros son aficionados a la pirotecnia y ví arder tres tiendas, más las que no ví, aquí las fotos de una.



LA VUELTA.

Recoger todo y llevarlo a la moto requería unas dos horas y buena planificación, no cesaba de nevar y cada vez que te quitas los guantes para hacer algo delicado duelen los dedos un montón y después te pones los guantes mojados y a volver a subir por más bultos, los amarras y a por más.
Aquí recogiendo la tienda, lo último.




No veas como duelen los dedos al amarrar las correas, debía haberle puesto unos enganches rápidos.

La moto arrancó a la primera despues de tres dias de heladas.



Copiando a los bárbaros, le puse unas esterillas a las defensas con bridas y el cambio fué espectacular, todo el calor del radiador, motor y escape iban a mis piernas. Alta tecnología. Horribles pero imprescindibles.



Y entonces comenzó el infierno, la salida era en cuesta arriba y desde el primer metro ví que tendría problemas, la moto no avanzaba y se iba de lado poco a poco, hasta que se fué del todo y me caí Y NO HABÍA AVANZADO MAS QUE DIEZ CENTÍMETROS, con la ayuda de varias personas levanto la moto y ya sudando comienzo el baile, avanzar cinco metros era un gran esfuerzo y tenía que parar un minuto, los guantes calefactables nuevos de 140 euros se apagaron y no podía desmontar todo para buscar el fusible, con doble guante tienes que hacer muchísima más fuerza para agarrar los puños, probé a quitarmelos pero era muy doloroso pues tenía las manos mojadas.
Mi compañero Oscar si podía avanzar poco a poco y lo perdí en la bruma, no nos vimos mas.
En una de mis caidas ví a Pablo que me ayudó a levantarme y me empujo unos cinco metros. Paré en un chiringuito y su novia Ana lo estaba pasando muy mal por lo que lo lógico era que intentase salir de allí.

CAIDAS DE DIEZ SEGUNDOS.
Estás agotado y acabas de caer otra vez, viene gente andando bajo la nevada y les pido ayuda, de mala gana me levantan la moto entre varios y cuando les doy las gracias se me abren los ojos un montón, parece que se ha movido un centímetro de lado, se me abren todavía más cuando se mueve otro centímetro... no, no pero si estoy parado y con los frenos cogidos, los que estaban conmigo se van al ver el asunto. NO QUIERO CAERME , de pronto los ojos no pueden abrirse más y se mueve - se mueve- me estoy cayendo- aguanto- la pierna está cada vez más abierta-PLAF- me caí. Esta vez no pasa nadie y tengo que descargar todo para poder levantarla, sudando y con los dedos azules no veas como duele amarrarlo todo.

Eran las diez de la mañana y ya me veía acampado de noche en el mismo sitio.

LA SALVACIÓN. OLÉ.
Me acordé que entre los muchos preparativos puse un spray de cadena liquida, a mi lado pararon dos alemanes que tampoco podían seguir y me decían ESPERRRRA, ESPERRRRRRA. Parece que es lo único que sabían en español.
Le puse el spray esperé unos minutos y la goma se volvió pegajosa.

Avanzaba, bailando de lado a lado, pero avanzaba. Cuando conseguí subir la cuesta había pasado hora y media PARA 200 METROS, pero ahora avanzaba, poco a poco empecé a adelantar a todos los que me habían pasado antes , en la bruma se veían montones de motos caidas o aparcadas y personas bregando. Muchos al ver que era el único que andaba me jaleaban y daban voces, no podrían entender como era capaz sin cadenas con esa mole. Bendito spray.
Como es normal de esto no tengo fotos, la cámara era imposible de manipular nevando.

Al no llevar esquies a los lados, iba todo el tiempo arrastrando los dos pies con mucha fuerza y los adductores me dolían.

Pasé mucha gente irreconocibles, no volví a ver a mis amigos. Así unos treinta kilómetros que me supieron a trescientos. Parada a descansar cuando vi una carretera despejada ya bajado lo peor.



Aquí ya pude meter la segunda ... y la tercera... que bien



Por fin las autopistas alemanas, a ritmos decentes.

Esa noche dormí a unos 500 kms de la partida, mis amigos me dijeron que solo avanzaron unos kms. A seguir solo.

La segunda jornada fué larga, pesada, aburrida, lluvia, frio unos 1.000 kms agotadores.
El último dia dejó por fin de sonar el avisador de helada. Hice unos 1.500 kms hasta llegar a casa. Tengo ls cara quemada el contorno de la visera. Ya no hace frio en España 10º.

YA SE HAN ACABADO????

ME HE QUEDADO ENGANCHADO MIRANDO LAS FOTOS Y LEYENDO TU HISTORIA. VAYA PASADA...

VAYA CAÑA DE "MÁKINAS". NO TE LAS IMAGINAS NI EN PELÍCULA.

Alucino. Alucino con los que tienen huevos de ir a Pingüinos, osea imagínate lo que alucino contigo. Ole tus cojones

Que pasada de viaje,y las fotos estupendas.

Pues eso que ya han dicho..............yo que creo que para ir a Pingúinos hay que ser de una masa especial...........para ir a Elefantes y contarlo.........¡¡¡¡ALUCINANTE¡¡¡¡ Menuda aventura...........

ENHORABUENA PEPEREINA