Aunque os leo desde hace tiempo puesto que siempre he sido un enamorado de la Intruder, el otro día me armé de valor, di un paso al frente, y compré una preciosa Suzuki Intruder C800 (vl 800 en los papeles) de 2006.
Aún ni siquiera os puedo decir que estoy encantado, ya que, de momento, sólo he soltado la pasta... La he comprado en un compraventa de Valencia y estoy a la espera de que la manden para Sevilla (ya os he dicho que me armé de valor).
Ah, la burrita está limitada, ya que aún no he cumplido los dos añitos del A2.
Mi anterior montura era una Kymco Venox 250 que sólo me ha dado alegrías y de la que estoy compleeeeetamente enamorado, pero, claro... le hago casi 2.000km al mes; explico esto: la uso para ir desde un pueblo al trabajo y, de vuelta, siempre aprovecho para hacer una pequeña rutita por los pueblos de alrededor en lugar de coger la fría autopista. Además, condición sine qua non, cada fin de semana, una rutita por la sierra de, mínimo unos 300km. O sea, que le doy vidilla. Ya os digo, una maravilla la Venox.
Os dejo, para completar, 30 segundos geniales de una de las mejores carreteras que he curveado, en El Berrocal. (Con roce de estribera incluido)
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y, en conducción, no deja de sorprenderme lo fácil de manejar que es, para lo que pesa. Muy muy cómoda.